Testamento de otoño
MATILDE URRUTIA, aquí te dejo
lo que tuve y lo que no tuve,
lo que soy y lo que no soy.
Mi amor es un niño que llora:
no quiere salir de tus brazos,
yo te lo dejo para siempre:
eres para mí la más bella.
Eres para mí la más bella,
la más tatuada por el viento
como un arbolito del sur,
como un avellano en agosto.
Eres para mí suculenta
como una panadería,
es de tierra tu corazón,
pero tus manos son celestes.
Eres roja y eres picante,
eres blanca y eres salada
como escabeche de cebolla.
Eres un piano que ríe
con todas las notas del alma
y sobre mí cae la música
de tus pestañas y tu pelo.
Me baño en tu sombra de oro
y me deleitan tus orejas
como si las hubiera visto
en las mareas de coral:
por tus uñas luché en las olas
contra pescados pavorosos.
De Sur a Sur se abren tus ojos
y de Este a Oeste tu sonrisa,
no se te pueden ver los pies
y el sol se entretiene estrellando
el amanecer en tu pelo.
Tu cuerpo y tu rostro llegaron,
como yo, de regiones duras,
de ceremonias lluviosas,
de antiguas tierras y martirios.
Sigue cantando el Bío-Bío
en nuestra arcilla ensangrentada,
pero tú trajiste del bosque
todos los secretos perfumes
y esa manera de lucir
un perfil de flecha perdida,
una medalla de guerrero.
Tú fuiste mi vencedora
por el amor y por la tierra,
porque tu boca me traía
antepasados manantiales,
citas en bosques de otra edad,
oscuros tambores mojados:
de pronto oí que me llamaban,
era de lejos y de cuando
me acerqué al antiguo follaje
y besé mi sangre en tu boca,
corazón mío, mi araucana.
Qué puedo dejarte si tienes,
Matilde Urrutia, en tu costado
ese aroma de hojas quemadas,
esa fragancia de frutillas
y entre tus dos pechos marinos
el crepúsculo de Cauquenes
y el olor de peumo de Chile?
En el alto otoño del mar
lleno de niebla y cavidades,
la tierra se extiende y respira,
se le caen al mes las hojas.
Y tú inclinada en mi trabajo
con tu pasión y tu paciencia
deletreando las patas verdes,
las telarañas, los insectos
de mi mortal caligrafía.
Oh leona de pies pequeñitos,
qué haría sin tus manos breves,
dónde andaría caminando
sin corazón y sin objeto,
en qué lejanos autobuses,
enfermo de fuego o de nieve?
Te debo el otoño marino
con la humedad de las raíces
y la niebla como una uva
y el sol silvestre y elegante:
te debo este cajón callado
en que se pierden los dolores
y sólo suben a la frente
las corolas de la alegría.
Todo te lo debo a ti,
tórtola desencadenada,
mi codorniza copetona,
mi jilguero de las montañas,
mi campesina de Coihueco.
Alguna vez si ya no somos,
si ya no vamos ni venimos
bajo siete capas de polvo
y los pies secos de la muerte,
estaremos juntos, amor ,
extrañamente confundidos.
Nuestras espinas diferentes,
nuestros ojos maleducados,
nuestros pies que no se encontraban
y nuestros besos indelebles,
todo estará por fin reunido,
pero de qué nos servirá
la unidad de un cementerio?
Que no nos separe la vida
y se vaya al diablo la muerte!
PABLO NERUDA
en: A media voz
9.29.2010
9.22.2010
9.14.2010
Letras
EN LA PUERTA DEL OCASO
Tengo antojo de la noche:
la noche blanda,
la noche azúcar,
la augusta noche.
Quiero recorrerla en mi vigilia,
retratar con mi verso su color,
decirle que no guarde su hermosura,
¡que sea mujer hasta el cansancio!
Se me antojan sus locas maravillas,
su tacto, su magia y su perfume,
su luna tantas veces alabada,
y besar la música de su inmensidad.
Anhelo verla derramarse
en sueños, alturas y estrellas,
ver cómo pasean sus corderos,
cómo inventa amorosos,
cura insomnes
e inquieta latidos.
Quiero sentirme un hijo suyo,
sentarme en la suavidad de su cortina
y envolver mi poesía con su piel.
Quisiera revelarle mi locura
y entregarle mi pasión incendiada;
¡quisiera que durara todo el día
su desnuda y perfecta sombra!
¡Tengo antojo de la noche!,
de volverla sábana y primavera,
de ocultarme en su mirada
y escapar de la muerte,
del sol
y de la vida.
LUIS FLORES ROMERO
En:
Lenguaraz, año 5, número 19, verano 2009, p.35.
Tengo antojo de la noche:
la noche blanda,
la noche azúcar,
la augusta noche.
Quiero recorrerla en mi vigilia,
retratar con mi verso su color,
decirle que no guarde su hermosura,
¡que sea mujer hasta el cansancio!
Se me antojan sus locas maravillas,
su tacto, su magia y su perfume,
su luna tantas veces alabada,
y besar la música de su inmensidad.
Anhelo verla derramarse
en sueños, alturas y estrellas,
ver cómo pasean sus corderos,
cómo inventa amorosos,
cura insomnes
e inquieta latidos.
Quiero sentirme un hijo suyo,
sentarme en la suavidad de su cortina
y envolver mi poesía con su piel.
Quisiera revelarle mi locura
y entregarle mi pasión incendiada;
¡quisiera que durara todo el día
su desnuda y perfecta sombra!
¡Tengo antojo de la noche!,
de volverla sábana y primavera,
de ocultarme en su mirada
y escapar de la muerte,
del sol
y de la vida.
LUIS FLORES ROMERO
En:
Lenguaraz, año 5, número 19, verano 2009, p.35.
9.04.2010
Y dijo:
"¿Hay diferencias entre el modo en que miramos un rostro y el modo en que miramos una casa? [...] Hay una voracidad diferente."
Tullio Pericoli
El alma del rostro
9.02.2010
Letras
3.Segundo recuerdo
...rumor de besos y batir de alas...
G .A. Bécquer
También antes,mucho antes de la rebelión de las sombras,
de que al mundo cayeran plumas incendiadas
y un pájaro pudiera ser muerto por un lirio.
Antes, antes que tú me preguntaras
el número y el sitio de mi cuerpo.
Mucho antes del cuerpo.
En la época del alma.
Cuando tú abriste en la frente sin corona, del cielo,
la primera dinastía del sueño.
Cuando tú, al mirarme en la nada,
inventaste la primera palabra.
Entonces, nuestro encuentro.
---
RAFAEL ALBERTI
tomado de:
http://amediavoz.com/alberti2.htm
9.01.2010
Y que ya es septiembre...
3 Lectura poética
4 Presentaciones de libros
5 Cumple de my dear lunita, Sharon
7 Cumple de mi prima Lore
9 Cumple de my dear friend y colega, Letty
10 Inauguración de exposición Fotográfica
16 al 18 en Tijuana y el 19 en Tecate: 5o Encuentro de Poesía Caracol 2010
18 Cumple de mi tío Mario y de la hermosa Mirna, que camina acompañada =)
23 Cumple de Marco
24 Cumple de mi beloved Kix!!!
...y lo que vaya saliendo!